¡Agua! Que me ahogo

Me encuentro a mi querido Martín en expansión, relacionando el agua con Monserrat (una antigua historia de matices “popular religiosos” que acaba con siete años de lluvia sin parar). Al tiempo que mi querida alcaldesa que en el pleno del lunes aseguraba que el consorcio de la costa brava le habían asegurado agua hasta septiembre (¡que no cunda el pánico!). Y bajo mano, me envían un real decreto del gobierno de la región sobre medidas excepcionales y de emergencia de obligado cumplimiento sobre la utilización del agua. (¡Denuncias y sanciones!).

Quizás por eso, observo con tristeza estas pequeñas notas que he enviado a mi querido Martín como recuerdo y complemento. ¡Recuerdos!.

El canon del agua en Cataluña entro en vigor el 1 de abril de 2000, es decir, hace ya ocho años. Decían que a través del canon de agua el usuario contribuiría a los costes del servicio del ciclo del agua: inversiones en embalses e infraestructuras de producción, transporte etc…

Así mismo existía el plan hidrológico de las cuencas internas de Cataluña que fue aprobado en 1998 que describía el estado hidrológico de 1992 y preveía las situación en el 2002 y 2012 como primer y segundo horizonte. En sus actuaciones previstas estaban mejorar la garantía del abastecimiento y la calidad del agua en Cataluña.

En alguna ocasión escuche que decían con cierto orgullo: Estas cuencas (internas) constituyen el distrito de cuenca hidrográfica o fluvial de Cataluña y son competencia exclusiva de la Generalidad (gobierno regional) y su gestión está encomendada a la Agencia Catalana del Agua.

¡OLE!, ya tenemos autonomía y ahora… ¿Cómo vamos a echar la culpa a Madrid?.

Parece ser que lo importante no es la sequía que estamos sufriendo actualmente, sino la labor que se ha hecho a lo largo de estos treinta años de gobierno regional y quizás desde el año 2003 el haber podido tener la convicción de estar en los inicios de lo que marca la directiva europea (llamada DMA), en la cual se aconseja que participen tantas personas como sea posible en... ¡Eso es lo importante!. Es decir, la aplicación de la DMA que se lleva a cabo a través de un proceso participativo que garantiza la información, la consulta y la participación activa de los ciudadanos y las entidades para la validación del diagnostico con la redacción de programas de medidas.

Quizás por eso, ha salido ese real decreto del gobierno regional alertando a todo bicho viviente que debe estar… Mirando si la piscina del vecino esta llena o vacía o si el turista que va a venir en verano podrá bañarse sólo en el mar o en su piscina o su jacuzzi o si el jardín esta con plantaciones autóctonas o se duchan al completo o solo se lavan los pies al salir de las playas…

Será por eso que no quiero preguntarme: ¿Qué pasará en la costa brava después de que ahoguemos nuestra sed y nos quedemos solos, sin turistas y sin agua?. Es decir, después de septiembre.

Lo que esta claro es que a nuestros representantes que tanto han trabajado para nuestro bienestar, no se les va a mojar ni un pelo. Y si insisten, le volveremos a votar, por su buena gestión.