Vuelve la dictadura democrática

Unos pocos imponen su ideología y su programa a unos muchos

En Rosas aun es más evidente, pues en el año 2005 dicen que éramos 15.535 personas y dicen que durante este año 2006 se había llegado a 17.000 habitantes, pero el censo electoral es tan solo de 9.750 personas con derecho a voto y solo han votado 4.904 personas, es decir, un 29 % de la población invernal.

Así pues, estamos ante una dictadura democrática y entre el 13 al 17% de representación serán los que formen gobierno: Unos pocos imponen su ideología y su programa a unos muchos.

Vean los resultados en Rosas: 1.668 de ciu, 1.376 de psc, 698 de pp, 630 de erc, 229 de icv y 77 de cs. Hagan cálculos si aun no están convencidos.

¿Qué no son los números que les presentan los medios de comunicación, ni los tantos por cientos? Claro, la población se reduce si se impone el “derecho a votar” y siempre se podrá recurrir a esa frase tan clarividente: “no están todos los que son ni son todos los que están”.

Comentarios sobre los resultados:

Se vuelve escuchar eso de: “lamentar la bajada de participación”... Una de las primeras frases, una de las primeras palabras que se olvidarán quizás demasiado rápido al ver como el “oro” les empieza a entrar en los bolsillos.

Se vuelve a escuchar eso de: “autocrítica ¿qué es lo que falla?”... Una pequeña lamentación, una pequeña justificación, una pequeña pregunta frente a las cámaras, que se quedará en el cajón, una vez que ocupen los asientos recientemente tapizados en el parlamento.

Así pues, si los representante que ocuparon los puestos en el anterior gobierno catalán solo representaban apenas un 26% del total de la población y quizás por eso, sólo una parte de nuestros representante impusieron tanto su ideología como sus proyectos a todos los ciudadanos, tal como han ido las selecciones, se ha vuelto a repetir la misma situación o quizás una muy parecida, con lo cual volveremos a sufrir una u otra dictadura de una u otra minoría.

Como hace tres o nueve años, la autocrítica se quedo en los cajones, como hace tres años, aquello de que “todos sabrán leer los resultados” se dirá una vez más, pero nuestros supuestos representantes de turno, habrán conseguido su gran triunfo, ¿Que triunfo? Pues ese que es tan claro, se han asegurado el sueldo para otros tres o cuatro años.

Realmente, tendremos que felicitar a todos nuestros representantes, pues lo hacen bien, ¿qué hacen bien?, pues eso de que cada vez tienen menos trabajo en cuanto a atraer a ciudadanos que se adhieran a sus proyectos, y eso hace también, que les sea más fácil conseguir ese trabajo seguro, quizás por eso, podría llegarse a pensar que lo hacen a propósito y mientras puedan seguir olvidando lo que realmente representan, mientras estén gobernando unos y hablando otros, pero eso si, comiendo y vistiendo y trasladándose de un sitio a otro, gracias al dinero de todos. ¡Aquí no pasa nada!.

Nadie siente vergüenza y todos ganan o resisten o se mantienen es sus puestos.